Ana y Carlos se casan dentro de muy poquito y qué mejor manera que celebrarlo con una preboda bien fresquita en Jaca.
Ana es de allí y yo casi como si lo fuera, jeje, así que qué mejor sitio para hacerla.
Pasamos una tarde llena de risas, y es que con ellos es imposible no disfrutar. Paseamos por algunas de los rincones más emblemáticos de la ciudad para terminar en el agua, con estos calores es lo mejor que pudimos hacer.
Ahora a disfrutar de esta deliciosa parejita y sus momentazos.