Cuando la música suena y se une a las palabras más bonitas se te inunda de emoción todo el cuerpo. Así es cómo se sentía la boda de Elena y Álvaro en la Villa Santa Ana.
Elena tiene una pequeña librería en la calle Las Armas de Zaragoza donde los libros antiguos desbordan pasión, aquella que ella comparte con su padre. Por esto es de entender que los libros, que son grandes tesoros, envuelvan su vida y las palabras que oímos en la ceremonia nos dejaran a todos boquiabiertos.
Y así es como volvimos a quedarnos cuando Álvaro le sorprendió a ella cogiendo su guitarra e hizo vibrar todos los corazones de los que allí estábamos.
El Otoño fue la estación perfecta como escenario para escuchar el «Sí quiero» de esta parejita que se quiere con locura y el lugar donde celebraron todo no podía estar más precioso.
La de ellos fue una boda de las que se guardan para siempre y en la que hasta los más pequeños disfrutaron muchísimo.
En esta ocasión me acompañó el genial Carlos Canales de Weddinfocus con el que es un auténtico lujazo trabajar y compartir. Gracias amigo!!!
Y gracias también a esas familias que nos hicieron estar como en casa.
Elena y Álvaro, que seáis muy muy felices. Os merecéis todo lo mejor.
Peluquería y maquillaje: Oliver y Goretti
Vestido de Elena: Estela Garro
Ramo y flores: Nacho Bergara
Traje de Álvaro: Pedro del Hierro
